viernes, 8 de enero de 2016

Microrrelato: Diario de las raíces

Desde la banqueta observo el claro de sol que se expande por el suelo y me acobija con suave calidez. Desde mi traje fino a medida observo a mi siguiente victima. No, quizás victima sea un poco ofensivo. "Raíces", un nombre apropiado para estas personas a quienes amablemente les sedo mis servicios. No es necesario que me contraten, tampoco espero remuneración monetaria ¿Un héroe? No, eso es demasiado. Llamémosle el servicio de un buen samaritano.
Me gustan los recuerdos que obtengo de las raíces. Cada noche, imágenes aleatorias vienen a mi mente de mi arduo trabajo, sumamente gratificante. Me apena, pero los sueños han llegado a tal vividez, que he despertado lleno de sabia en mi entrepierna.
La expresión que más me ha gustado es mi método favorito, el cual aplico siempre en mi trabajo. Raíces partidas, cuello negro, sabia blanca y roja fluyendo a través del agua.

Kinafune

No hay comentarios.:

Publicar un comentario